Todas las personas necesitan un tiempo para comprender que los tiempos que se vive la vida en una profesión van pasando mientras transitamos por ella.
No hace falta entender que no todos los individuos pueden asimilarlo y se aferran a los que una vez aprendieron y decidieron trasmitir.
Los docentes, como en muchas profesiones les cuesta adaptarse a esos cambios y suelen ser resistentes impidiendose así mismos abrirse,despejar las ideas y emprender esa maravillosa idea que es experimentar cosas nuevas.
La resistencia a ver que existen esos cambios es personal y la forma con las que han sido educados desde la niñez. Aferrarse a paradigmas viejos o caducos solo logran ailarse del resto de la sociedad y sin querer terminan por ser seres egoístas a la hora de ponerse al día para brindarle a los demás nuevos aprendizajes.
Cuando se ven este tipo de situaciones lo mejor es intentar que profesionales coparticipen en emprendimientos sencillos e innovadores para que lentamente vean que ser resistentes es algo que algún día puede jugarles en contra.
La resistencia debe ir debilitandose de a pco. Lo que ayuda es el tiempo, las conversaciones sencillas y la posibilidad de brindarles a esas personas materiales,instrumentos,bibliografía y sobre todo compartir.
Seguramente cada docente que ya tiene una profesión tiene su propio tiempo para transitar ese período de resistencia. Si logra traspasar esa barrera,entonces podrá vencer y adaptarse a los nuevos cambios.
Cambios que sólo beneficiarán al docente y a todos aquellos que lo rodean.
La resistencia a los cambios hace que la trayectoria profesional se estanque, se detenga y cuanto mas tiempo pase,solo se logra desgastarse a sí mismo y a todos los que lo están en su entorno.
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