miércoles, 26 de marzo de 2014

Tu cuerpo, el mejor comunicador¿ cómo entrenarlo?



Art.365










       

Tu cuerpo, el mejor comunicador ¿Sabes cómo entrenarlo?


No solo nuestro rostro transmite emociones. Una mirada ladeada a la derecha, una ceja levantada, dicen tanto como una persona sentada con las piernas o los brazos cruzados. Las personas somos todo un compendio de comunicación no verbal del que muchas veces no somos conscientes. En ocasiones nos esforzamos en esconder nuestras emociones y sentimientos sin comprender que nuestras manos o la inclinación de nuestro torso, son ya todo un indicador de lo que en ese momento, está pasando por nuestra cabeza.

Miedos
, ansiedades, dudas, desconfianza… son en ocasiones aspectos que no deseamos mostrar y que sin embargo, nuestro cuerpo se empeña en transmitir de modo involuntario. ¿Cómo evitarlo? ¿Cómo entrenar o comprender la comunicación corporal? Te lo explicamos.

APRENDE A COMRENDER LA COMUNICACIÓN DE TU CUERPO


Para ser efectivos con nuestros mensajes orales, necesitamos de una congruencia corporal. Seguro que te ha pasado alguna vez: querer transmitir seguridad durante una entrevista de trabajo, y notar de pronto cómo nos tiemblan las manos, o cómo sin saber por qué, hemos acabado cruzando los brazos y las piernas en actitud defensiva.

Nuestro cuerpo es un poderoso comunicador sobre nuestro carácter y nuestras emociones, tomar conciencia sobre este tipo de lenguaje es la clave que nos ofrecerá la oportunidad no solo de conocernos mejor a nosotros mismos, sino de obtener mayor seguridad a la hora de interaccionar con otras personas.

1. El espacio


Cada uno de nosotros dispone de una zona corporal propia. Una especie de zona de confort. Hay quienes mantienen los límites a la hora de hablar con los demás, a la hora de expresarse con las manos, con sus movimientos.

Otro sin embargo, traspasan ese límite y buscan la cercanía con los demás, algo que en ocasiones –y dependiendo quizá del tipo de cultura- puede ser aceptado o visto con relativa incomodidad. Las personas introvertidas, por ejemplo cuidan siempre las distancias, a la inversa que las extrovertidas.


2. Las manos


Las manos son unos excelentes trasmisores de nuestra emocionalidad. También suele estar muy asociado al tipo de cultura, los latinos solemos ser mucho más expresivos con las manos que los orientales, por ejemplo. Pero debemos matizar más detalles sobre ellas:

-Los movimientos muy acusados con las manos son típicos en personas que en ocasiones, tienen dificultad para expresar verbalmente sus ideas o cuando le cuesta un poco hacerse comprender. Suelen apoyarse en ellas, gesticulan más exageradamente mediante las manos. Intenta mirarte a ti mismo delante de un espejo cuando estás explicando algo para comprobar si es tu caso. Utilízalas siempre de un modo equilibrado, no te valgas excesivamente de ellas o mostrarás cierta inseguridad.

-A la hora de estrechar la mano, hazlo de modo firme y con fuerza, aporta seguridad en uno mismo.


3. Los ojos


Los ojos son esos espejos que dejan reflejar los matices más sutiles de nosotros mismos. Es lo más sincero de nuestro cuerpo, son excelentes seductores, trasmisores de miedo, satisfacción, amabilidad, apertura… Según los expertos un modo adecuado para atraer a la vez que respetar a quien observamos, es la técnica de mirar-desviar-y volver a mirar. Aseguramos la intimidad de las otras personas, pero a la vez ofrecemos seguridad. Es muy efectivo a la hora de seducir a alguien que nos atrae, por ejemplo.

Cuando estés manteniendo una conversación seria, jamás desvíes la mirada a un lado o darás la impresión de que estás ocultando algo, e incluso que estás mintiendo.

4. La postura


El modo en que mantienes la espalda también dice mucho de ti. Si la mantienes muy recta con los hombros rígidos denotas dureza y cierta inflexibiliad. Si dejas tu torso inclinado hacia delante, o cruzas los brazos inclinándote a un lado, denotas cierta pasividad. Hay que cuidar mucho también el modo en que te sientas en una silla, si cruzas las piernas y los brazos transmites inseguridad y la necesidad de defenderte de los demás. Si te sientas casi en el borde de la silla transmites cierto nerviosismo.

Lo mejor es dejarte caer con tranquilidad, si tienes como costumbre cruzar las piernas está bien, pero recuerda no cruzar también tus brazos, mántenlos relajados sobre tu regazo o sobre los respaldos de la silla. Tampoco te inclines hacia delante.

Hay personas que, cuando están sentadas, empiezan mover mucho una de sus piernas. En ocasiones es un tic nervioso, característico de las personas muy nerviosas. Intenta controlarlo si es tu caso para ofrecer un aire más tranquilo, cercano y amable. - See more at: http://lamenteesmaravillosa.com/tu-cuerpo-el-mejor-comunicador#sthash.xk72gDI2.dpuf

Tu cuerpo, el mejor comunicador ¿Sabes cómo entrenarlo?


No solo nuestro rostro transmite emociones. Una mirada ladeada a la derecha, una ceja levantada, dicen tanto como una persona sentada con las piernas o los brazos cruzados. Las personas somos todo un compendio de comunicación no verbal del que muchas veces no somos conscientes. En ocasiones nos esforzamos en esconder nuestras emociones y sentimientos sin comprender que nuestras manos o la inclinación de nuestro torso, son ya todo un indicador de lo que en ese momento, está pasando por nuestra cabeza.

Miedos
, ansiedades, dudas, desconfianza… son en ocasiones aspectos que no deseamos mostrar y que sin embargo, nuestro cuerpo se empeña en transmitir de modo involuntario. ¿Cómo evitarlo? ¿Cómo entrenar o comprender la comunicación corporal? Te lo explicamos.

APRENDE A COMRENDER LA COMUNICACIÓN DE TU CUERPO


Para ser efectivos con nuestros mensajes orales, necesitamos de una congruencia corporal. Seguro que te ha pasado alguna vez: querer transmitir seguridad durante una entrevista de trabajo, y notar de pronto cómo nos tiemblan las manos, o cómo sin saber por qué, hemos acabado cruzando los brazos y las piernas en actitud defensiva.

Nuestro cuerpo es un poderoso comunicador sobre nuestro carácter y nuestras emociones, tomar conciencia sobre este tipo de lenguaje es la clave que nos ofrecerá la oportunidad no solo de conocernos mejor a nosotros mismos, sino de obtener mayor seguridad a la hora de interaccionar con otras personas.

1. El espacio


Cada uno de nosotros dispone de una zona corporal propia. Una especie de zona de confort. Hay quienes mantienen los límites a la hora de hablar con los demás, a la hora de expresarse con las manos, con sus movimientos.

Otro sin embargo, traspasan ese límite y buscan la cercanía con los demás, algo que en ocasiones –y dependiendo quizá del tipo de cultura- puede ser aceptado o visto con relativa incomodidad. Las personas introvertidas, por ejemplo cuidan siempre las distancias, a la inversa que las extrovertidas.


2. Las manos


Las manos son unos excelentes trasmisores de nuestra emocionalidad. También suele estar muy asociado al tipo de cultura, los latinos solemos ser mucho más expresivos con las manos que los orientales, por ejemplo. Pero debemos matizar más detalles sobre ellas:

-Los movimientos muy acusados con las manos son típicos en personas que en ocasiones, tienen dificultad para expresar verbalmente sus ideas o cuando le cuesta un poco hacerse comprender. Suelen apoyarse en ellas, gesticulan más exageradamente mediante las manos. Intenta mirarte a ti mismo delante de un espejo cuando estás explicando algo para comprobar si es tu caso. Utilízalas siempre de un modo equilibrado, no te valgas excesivamente de ellas o mostrarás cierta inseguridad.

-A la hora de estrechar la mano, hazlo de modo firme y con fuerza, aporta seguridad en uno mismo.


3. Los ojos


Los ojos son esos espejos que dejan reflejar los matices más sutiles de nosotros mismos. Es lo más sincero de nuestro cuerpo, son excelentes seductores, trasmisores de miedo, satisfacción, amabilidad, apertura… Según los expertos un modo adecuado para atraer a la vez que respetar a quien observamos, es la técnica de mirar-desviar-y volver a mirar. Aseguramos la intimidad de las otras personas, pero a la vez ofrecemos seguridad. Es muy efectivo a la hora de seducir a alguien que nos atrae, por ejemplo.

Cuando estés manteniendo una conversación seria, jamás desvíes la mirada a un lado o darás la impresión de que estás ocultando algo, e incluso que estás mintiendo.

4. La postura


El modo en que mantienes la espalda también dice mucho de ti. Si la mantienes muy recta con los hombros rígidos denotas dureza y cierta inflexibiliad. Si dejas tu torso inclinado hacia delante, o cruzas los brazos inclinándote a un lado, denotas cierta pasividad. Hay que cuidar mucho también el modo en que te sientas en una silla, si cruzas las piernas y los brazos transmites inseguridad y la necesidad de defenderte de los demás. Si te sientas casi en el borde de la silla transmites cierto nerviosismo.

Lo mejor es dejarte caer con tranquilidad, si tienes como costumbre cruzar las piernas está bien, pero recuerda no cruzar también tus brazos, mántenlos relajados sobre tu regazo o sobre los respaldos de la silla. Tampoco te inclines hacia delante.

Hay personas que, cuando están sentadas, empiezan mover mucho una de sus piernas. En ocasiones es un tic nervioso, característico de las personas muy nerviosas. Intenta controlarlo si es tu caso para ofrecer un aire más tranquilo, cercano y amable. - See more at: http://lamenteesmaravillosa.com/tu-cuerpo-el-mejor-comunicador#sthash.xk72gDI2.dpuArt 365Art 363

Tu cuerpo, el mejor comunicador¿ cómo entrenarlo?

No solo nuestro rostro transmite emociones. Una mirada ladeada a la derecha, una ceja levantada, dicen tanto como una persona sentada con las piernas o los brazos cruzados. Las personas somos todo un compendio de comunicación no verbal del que muchas veces no somos conscientes. En ocasiones nos esforzamos en esconder nuestras emociones y sentimientos sin comprender que nuestras manos o la inclinación de nuestro torso, son ya todo un indicador de lo que en ese momento, está pasando por nuestra cabeza.

Miedos
, ansiedades, dudas, desconfianza… son en ocasiones aspectos que no deseamos mostrar y que sin embargo, nuestro cuerpo se empeña en transmitir de modo involuntario. ¿Cómo evitarlo? ¿Cómo entrenar o comprender la comunicación corporal? Te lo explicamos.

APRENDE A COMRENDER LA COMUNICACIÓN DE TU CUERPO

Para ser efectivos con nuestros mensajes orales, necesitamos de una congruencia corporal. Seguro que te ha pasado alguna vez: querer transmitir seguridad durante una entrevista de trabajo, y notar de pronto cómo nos tiemblan las manos, o cómo sin saber por qué, hemos acabado cruzando los brazos y las piernas en actitud defensiva.

Nuestro cuerpo es un poderoso comunicador sobre nuestro carácter y nuestras emociones, tomar conciencia sobre este tipo de lenguaje es la clave que nos ofrecerá la oportunidad no solo de conocernos mejor a nosotros mismos, sino de obtener mayor seguridad a la hora de interaccionar con otras personas.
1. El espacio





Cada uno de nosotros dispone de una zona corporal propia. Una especie de zona de confort. Hay quienes mantienen los límites a la hora de hablar con los demás, a la hora de expresarse con las manos, con sus movimientos.

Otro sin embargo, traspasan ese límite y buscan la cercanía con los demás, algo que en ocasiones –y dependiendo quizá del tipo
de cultura- puede ser aceptado o visto con relativa incomodidad. Las personas introvertidas, por ejemplo cuidan siempre las distancias, a la inversa que las extrovertidas.

2. Las manos



Las manos son unos excelentes trasmisores de nuestra emocionalidad. También suele estar muy asociado al tipo de cultura, los latinos solemos ser mucho más expresivos con las manos que los orientales, por ejemplo. Pero debemos matizar más detalles sobre ellas:

-Los movimientos muy acusados con las manos son típicos en personas que en ocasiones, tienen dificultad para expresar verbalmente sus ideas o cuando le cuesta un poco hacerse comprender. Suelen apoyarse en ellas, gesticulan más exageradamente mediante las manos. Intenta mirarte a ti mismo delante de un espejo cuando estás explicando algo para comprobar si es tu caso. Utilízalas siempre de un modo equilibrado, no te valgas excesivamente de ellas o mostrarás cierta
inseguridad.

-A la hora de estrechar la mano, hazlo de modo firme y con fuerza, aporta seguridad en uno mismo.

3. Los ojos



 

Los ojos son esos espejos que dejan reflejar los matices más sutiles de nosotros mismos. Es lo más sincero de nuestro cuerpo, son excelentes seductores, trasmisores de miedo, satisfacción, amabilidad, apertura… Según los expertos un modo adecuado para atraer a la vez que respetar a quien observamos, es la técnica de mirar-desviar-y volver a mirar. Aseguramos la intimidad de las otras personas, pero a la vez ofrecemos seguridad. Es muy efectivo a la hora de seducir a alguien que nos atrae, por ejemplo.

Cuando estés manteniendo una conversación seria, jamás desvíes la mirada a un lado o darás la impresión de que estás ocultando algo, e incluso que estás mintiendo.
4. La postura




El modo en que mantienes la espalda también dice mucho de ti. Si la mantienes muy recta con los hombros rígidos denotas dureza y cierta inflexibiliad. Si dejas tu torso inclinado hacia delante, o cruzas los brazos inclinándote a un lado, denotas cierta pasividad. Hay que cuidar mucho también el modo en que te sientas en una silla, si cruzas las piernas y los brazos transmites inseguridad y la necesidad de defenderte de los demás. Si te sientas casi en el borde de la silla transmites cierto nerviosismo.

Lo mejor es dejarte caer con tranquilidad, si tienes como costumbre cruzar las piernas está bien, pero recuerda no cruzar también tus brazos, mántenlos relajados sobre tu regazo o sobre los respaldos de la silla. Tampoco te inclines hacia delante.

Hay personas que, cuando están sentadas, empiezan mover mucho una de sus piernas. En ocasiones es un tic nervioso, característico de las personas muy nerviosas. Intenta controlarlo si es tu caso para ofrecer un aire más tranquilo, cercano y amable. -

jueves, 20 de marzo de 2014

Líneas de trabajo con docentes para asesorar

Art,364


Ana María Castro Luca
Lic. En Cs de la Educación



Líneas de trabajo

Manejar herramientas que ya tengo y veo como intercalar nuevas estrategias.
Marcar un eje
Ver problema en función de la situación
Uso de herramientas conceptuale . Ver áreas del programa menos utilizadas y armar un proyecto áulico derivado del PCC para su abordaje.
Manejo de secuencias de conceptos y de actividades.
Ver con qué frecuencia se planifican las diferentes áreas del conocimiento.

Dar cuenta al inicio de los rasgos institucionales y ver la importancia de los problemas que tiene la Institución, el aula y casos particulares que hacen a la heterogeneidad.
Es   tener claro las prácticas de enseñanza y de aprendizajes.
Partir de esas situaciones problemas que emergen e intervenir para modificar, cambiar y mejorar.
Pensar desde que punto  uno está posicionado para  realizar la gestión
Puntualizar acuerdos con los alumnos, para lograr mayor involucramiento y compromiso.
Si existen situaciones puntuales usar el recurso del informe para derivar casos, realizar seguimientos. La Dirección apoya en situaciones según protocolo de derivación.

Utilizar la “escucha” de los padres y alumnos  intencionalmente para llegar a acuerdos.
Señalar que el M/D desea hacer el uso de la visita de orientación y de supervisión  para transformar ,innovar.
Estrategias sugeridas: líneas de acción para cada docente o colectivo.
                                        Brindar bibliografía.
                                         Compartir y reflexionar en los intercambios.
                                         Recurso informático como acceso a nuevos  
                                         conocimientos.





 


sábado, 15 de marzo de 2014

Enseñar y educar.Un emprendimiento entre los docentes y las familias


Art 340
Ana Maria Castro Luca
Lic en Cs de la Educación
Se enseña en la escuela... pero se educa desde el seno familiar.



A la hora de hablar sobre la enseñanza, todos opinan y muchas personas no tienen idea de lo que reamente encierra el concepto enseñanza.

Los saberes académicos se realizan en un una Institución académica que si bien foma a los individuos, no termina la labor si no se coordina con la educación familiar.

Por mas que los docentes sean un gestor habilidoso del generar neuvos aprendizajes y que su objetivo sea elevar el rendimiento académico de los estudiantes, las familas deben de mentalizarse que en ese transitar de sus hijos  son tan responsables para que existan cambios sustanciales.

Ls diferentes que se manejan desde los hogares, la autoestima, el lugar social que cupa la familia,el tiempo entre escuela y hogar deben ser fortituamente equitativos.

Si queremos que la educación vuelva a tener esa relevancia histórica que nos destacó en otros tiempos ,basta que volvamos a reveer la cultura, los valores,las virtudes morales que ya parece que no están de moda para volver a darle luz a la importancia de como mejorar las futuras generaciones de jóvenes para que sean los adultos del mañana sanos, con juicio crítico y formadores a su vez de nuevos individuos que sean útiles a las socciedad.

Un mensajes a las familias: no delegear sus inherentes resposnabilidades y no dejen que la escuela resuelva sus responsabilidades.

Estrechemos los vínculos sociales y pongamos en vigencia los valores.Los valores no son una moda.

Son la esencia de la vida.
Imposible creer que los padres no se invlucren como lo hacían las generaciones anteriores ,donde desde el hogar, los hábitos y valores se inculcaban en la familia y se veían reflejados cuando los hijos entran en círculos sociales como ser las escuelas.
Nuevas corrientes de psicología están reviendo sus paradigmas y se replantean si volver a los antiguas formas de orientar a padres sobre la forma que deben de educar a sus hijos.
Estas generaciones de pequeños deben de tener límites y respetar a los adultos como en las décadas de los años 50 y 60 donde los padres tenian un rol significativo .

Ana Maria Castro Luca

Lic en Cs de la Educacion

Docente

jueves, 13 de marzo de 2014

Habito de leer

Art. 363 
El hábito de leer







Libros vs. computadoras.
 A los niños hay que darles la importancia, las oportunidades, y los materiales para que puedan explorar el mundo de los libros. Es sin duda la escuela el lugar en donde se da trascendencia a este tema, pero no queda atrás la responsabilidad de la familia que actualmente debe tomar un papel activo, en donde leer, sea parte de su vida cotidiana.
De los diversos instrumentos del hombre, el más asombroso es, sin duda, el libro. Se debe insistir en la lectura soporte papel dado que las computadoras han invadido la vida del lector. A diario se lee en soporte digital. Esto es valioso. Pero hay que apostar a utilizar los libros como textos fuentes. Es importante la alfabetización temprana en los niños porque es un proceso que evoluciona e influye en el desarrollo cultural.
Hay niños a quienes les gusta mucho leer y solicitan que se les lea y otros que son indiferentes y perezosos y prefieren los video juegos. Existe un alto porcentaje de deficiencias en el área de la lengua se debe a los pocos hábitos lectores que los niños de este siglo tienen. La lectura ha sido relegada por grandes y poderosos atractivos como la televisión el video, las computadoras. No tienen que ser lecturas mecánicas, la lectura más que leerla debe ser comprendida. Hoy existe una lectura transaccional, en donde le lector transactúa con el texto que lee. Para comprenderlo sabrá apelar a conocimientos anteriores, sus experiencias vividas. ¿Pero como hacerlos leer y cuando? A los niños hay que proporcionarles lecturas funcionales, que estén actualizadas y que sean de su interés. Favorecer situaciones en donde los propios niños puedan seleccionar textos que si leerán (Sobre todo siempre que se pueda hay que llevarlos de compra a una librería o regalarles un libro en su cumpleaños). Se debe de acompañar en el proceso lector. Los padres deben toman un tiempito para sentarse junto a sus hijos y leerles ¿A qué hora? No importa, basta con que se sientan ganas. Consejos:
  • Comenzar por libros que tengan muchas figuras y posean colorido. Eso atrae a los inexpertos lectores.
  • Pídanle que anticipen lo que dirá la parte escrita.
  • Jueguen con las ideas del texto, inventen finales, cambien el nombre de los protagonistas etc.
  • Compartan titulares de los diarios, recetas de cocina, cartas de familiares, manuales de instrucción de los propios juegos que ellos usan o los carteles que hay en la calle.
Esto hará que el niño le asigne a la lectura un sentidos ser lector nos enfrenta a una postura activa y a desechar el rol del lector como receptor pasivo. La lectura no es un asunto fácil, pero tampoco es imposible, exige dedicación, esfuerzo, trabajo repetido y será más fácil hacerles entender a los niños que el libro es un amigo.
Ana Maria Castro Luca Docente / Licenciada en Lic. Ciencias de la Educación