Hace unos días tuve una conversación con mi sobrina Natalia de 18 años y como teníamos un tiempito, (cosa rara en la actualidad) ,sin querer me preguntó un tanto convencida que lo que ella está viviendo en estos tiempos de pleno auge del S. XXI es realmente lo mejor.
-¿Cómo se divertía la juventud de antes?
Yo, defensora de mis recuerdos, me fue fácil contestar rápidamente a esa pregunta con cierta calidez , añoranza y nostalgia.
- Hoy en día, los jóvenes tienen su moda, su estilo y sus códigos.
Creen que lo presente es lo legítimo, lo verdadero y lo que se estila. Que antes no existían cosas por lo que se cree que hace una década atrás la juventud no usufructuaba los placeres que la vida da hoy.
Es cierto que no había celulares, por lo que para avisar en casa que se llegaba más tarde, o que ibas a pasar por lo de una amiga , era más complicado. Las madres se preocupaban mucho y los horarios de salidas eran menos extensos que ahora .Había que legar antes del anochecer o te llevabas algún rezongo.
A pesar que la tecnología ha invadido los hogares y todos tienen televisión por cable, video juegos y computadoras, antes también se vivía feliz a pesar que los padres eran más severos.
Como había sólo cuatro canales, uno se entretenía haciendo rondas donde se conversaba, se tocaba la guitarra y se tomaba mate, amuchas veces con la pelota en una canchita del barrio, o en el fondo de algún jardín .Las bicicletas servían para hacer mandados y en las tardes era sagrada la merienda que la vieja hacía con leche con cocoa y pan con manteca.
¿Si no existían los shooping, las marcas de moda, que hacían?
Los días lluviosos también la pasábamos bárbaro. En cada casa era infaltable las revistas de chistes de Paturuzito, Mafalda y otros. La ropa se usaba según la moda, pero duraba más tiempo en quedar en desuso. Pasear por 18 de julio y ver las vidrieras era interesante. Fue punto de encuentro de muchos jóvenes..
Quizás los jóvenes de hoy, dirán que estas cosas sean aburridas, pero quiero que los chicos de hoy ,sepan esto y comprendan que si lo recuerdo hoy en día después de tanto tiempo, es porque éramos felices.
¿ -A que edad empezaste a salir?
Antes había una edad para todo.
Jamás se podía ir a bailar antes de los quince años, para algunos y a los 18 para otros.
También nos llegó ese día y lo curtimos al máximo.
La música era de onda, la del momento pero no se consumía tanto alcohol como ahora.
Por su puesto que de drogas, ni se hablaba.
La felicidad de ir a esos boliches era la de pasarla bien, compartir novedades, mostrar la ropa que lucíamos y bailar.El día que se estilaba eran los sábados y todo empezaba relativamente temprano. No sé que esperan ahora hasta las dos de la madrugada para entrar!. Para los chicos eran tiempos en donde ellos tenían que elegir con quien querían bailar, porque no se estilaba que las chicas se lo pidieran.
Así que más de una temía “planchar” toda la noche si nadie la sacaba a bailar.
Del sexo femenino era más introvertido, pero igual se hacía ojitos, pero muy disimuladamente. Cuando se formaba una pareja de novios, casi siempre se conocían de antes, pero igual así la familia aumentaba la vigilancia.
Los zaguanes, caminatas por las plazas ,a la luz del día eran comunes. Y un beso... demoraba en llegar. Pero se conversaba poco de lo que hacía cada pareja. Y los amores duraban más que ahora .No existía la palabra “ amigovios”. Tener novio o novia, significaba algo muy serio y comprometido y no perecedero.
-¿Vos crees que nosotros los jóvenes desaprovechamos el tiempo, que estudiamos menos?
-La verdad no se, pero observo a los adolescentes tratando de vivir todo en un día. Que quieren disfrutar al máximo ya que en la mayoría de los casos no quieren esperar al mañana. Sueñan con sacar la libreta de auto, ir a alta velocidad ,les molesta andar en ómnibus, se quejan mucho más, y a menudo se aburren aunque estén en una barra de amigos reunidos.
Optan más por la noche ,que por hacer un asado los domingos con refrescos. Ahora salen a pasear ...pero con una botella abajo del brazo.
Si estudian menos o se preocupan no sé. Pero veo que cada vez se dedican menos tiempos para el estudio y son más largas las conversaciones telefónicas con las amistades. Antes te ponían en tu cuarto y te tomaban la lección de memoria, si no te dejaban en penitencia sin salir los fines de semana. Los profesores eran re-exigentes y las notas eran nuestro clavario.¡Ah ¡también existían las rabonas, pero ay de si te pescaban! Pero eso de fumar desee muy Jove me parece mal. Claro que lo hicimos, pero ya éramos más grandecitos y sin que el viejo se enterara! En casa estaba prohibido.
_¿Tenías muchos amigos?
-Claro que sí! Amigos y de los buenos. Aquellos que estaban en las buenas y en las malas. Gente como uno, que de a poquito formaban parte de la familia. Que compartíamos todo y que disfrutábamos pero sin perjudicar a nadie. Aquellos pensaban como nosotros y cada uno tenía su personalidad ,por lo que se respetaba no por
“ como” era o se vestía sino “ por” lo que era.
Existía mucho el respeto por el otro y había valores que eran pilares de nuestra forma de vida.
Se podía confiar, eran desinteresados teníamos las mismas inquietudes y si bien nos divertíamos, no atentábamos contra nuestra salud como ahora que abusan del alcohol y de las drogas. No se necesitaba estar medio borracho” para soñar y aprender cosas de la vida. Si bien no participábamos de los festivales eufóricos del rock, la radio y el grabador eran motivos para intercambiar temas de aquella actualidad.
Ahora se preocupan más los chicos de ahora, creo que es porque participan más de la vida real, de los apuros económicos de los padres, de los problemas familiares, de las discusiones , de los temas como el divorcio, el compañero de mi madre, la violencia familiar, y el estrés.
Éramos realmente felices, si imaginarnos como hacía la familia para llegar hasta fin de mes, sin preocuparnos de los temas de los grandes.
¿Entonces antes erta mejor que ahora?
-No, para nada, hay cambios y permanencias. Claro que los cambios han sido muy grandes y hay que saber manejarlos, lo que los adultos debemos dejarle a los más jóvenes es que debe permanecer aunque cueste cosas que deben de pasar de generación en generación... los valores, porque ellos son la hipoteca del futuro mismo de cada uno y que debemos de dejar como herencia a ustedes.
Hace unos años atrás, yo misma ,más o menos a tu edad, le hice la pregunta a mi madre
¿Cómo se divertían ellos, los que ahora son “ viejos” y me contó otras historias que me hicieron entender que no importa en que año sea, la juventud es la juventud, pero... hay que saberla vivir bien, porque los errores se los cobra el presente .
-Si pero...¿cómo hacer para no equivocarse?
-Para eso tenemos a los grandes,los que pasaron por lo mismo, los que viviero, que siempre nos advierten la forma y pueden darnos algunos consejos. Y aunque ahora creas que no sirven , guárdalos para después.
Ana María Castro Luca..
Est. De Licenciatura en Ciencias de la Educación
anamaria28@hotmail.com.Docente
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