Comienzan las clases

  Comienzan las clases…ilusión, apatía, alegría o desinterés.
Art. N° 357

Regresar a clases es toda una movida. Involucra a toda la comunidad estudiantil. Actualmente son miles y miles de personas que movilizan sus fibras interiores y que son incontables las reacciones que pueden tener.
No estamos sólo hablando de escolares o liceales, sino también de todos los adultos que rodean a los chicos y adolescentes.
No es sólo ponerles la túnica y el uniforme y enviarlos a clases.
Hay que ver y percibir que pasa por dentro de sus cabecitas, que hace que estos niños o adolescentes sientan y reaparezcan  sentimientos desencontrados.


La familia cumple un rol fundamental al respecto. Debe reorganizarse para lograr cumplir con eficiencia los estrictos horarios y las rutinas  .
Actualmente nuestro sistema educativo ha ampliado el margen de edad para el ingreso a la educación.
Desde hace unos años, los alumnos entran con apenas tres añitos a un centro educativo y no a los seis años como lo era en décadas anteriores.
Parece sencillo, pasó el tiempo de las vacaciones y empiezan las clases.
Pero no es así, sobre todo en los cambios de ritmos. Hay  que pensar en mínimos detalles que deben tenerse en cuenta además de elegir un buen colegio o de ver que mochila y que útiles deben comprarse para este nuevo evento.
Hay cosas que a veces pasan desapercibidas, pero q    ue son muy importantes,
Como ser  el  sueño, la hora de su siesta, los miedos y rabietas, el control de sus esfínteres, la hora de la alimentación etc.
Ni que hablar de los niños tímidos que con solo saber que compartirán horas con personas ajenas a su entorno puede ocasionarles algunos síntomas más frecuentes cada vez que estos niños hablan con otras personas son: enrojecimiento facial ,temblor de manos ,palpitaciones ,sudoraciones tartamudeo ,ansiedad antes extraños.
A veces en los primeros días existen en algunos pequeños como una especie de fobia escolar. Puede ser que sea  relacionado con el miedo de los niños por dejar a la madre que por el miedo a la escuela. Este caso puede manifestarse cuando el niño despierta por la mañana quejándose de náuseas, dolor de estómago de cabeza.Si poco después de haber recibido autorización para quedarse en casa, los síntomas desaparecen los padres deben de tomar una postura y ver la manera de incentivarlos para ir al cole.
El problema en sí, es cuando el niño aumenta su inasistencia a la escuela, se vuelve tímido e introvertido por no desarrollarse normalmente con niños de su misma edad. En este caso, es mejor consultar con un especialista para ver la manera de cómo ayudar a disminuir este temor.
Al contrario de los niños extrovertidos, éstos son muy comunicativos, tienen facilidad para expresar o que sienten. Les gusta estar siempre dentro de grupos, pues siempre están en busca de compañía, detesta la soledad.
Participan en cada actividad que se presente sobretodo en la escuela, siempre están dispuestos a prestar ayuda en lo que puedan.
Expresan sus ideas sin temor a equivocarse, ya que son seguros de lo que piensan. Suelen enfadarse como todos los niños tal vez gritando, pero pronto se les pasa el enfado y vuelven a ser como antes.
Son niños muy activos y por lo general más despiertos que otros niños de su misma edad.
Hay que ver también los alumnos que ya han iniciado el ciclo escolar y deben de cambiar de instituciones. Sobre todos los liceales.  Regresar es siempre un  sentimiento desencontrado. Por un lado, volver a tener la sociabilidad y compartir con sus pares es un buen comienzo, pero por el otro lado la balanza se inclina por recordar los sufrimientos y las exigencias de años anteriores y eso hace que los adolescentes tengan cierta reticencia a volver a estudiar. Sobre todo aquellos que han debido estudiar en el verano para dar algún examen
Los docentes también juegan un rol muy especial.
Los actores que se involucran más son los maestros y docentes que sienten las mismas inquietudes y desconciertos a la hora de recibir a los alumnos. A pesar de tener otra edad, estar especializados en el tema , estos se preocupan por la niñez y la juventud dado que no es tan fácil enfrentarse a un grupo en donde lejos de ser homogéneo es al contrario muy heterogéneo. No es como la de antes. Alumnos con características diferentes y padres con dificultad de tener entrevistas periódicas debido a exigencias laborales perjudican sin lugar a dudas conocer al docente que estará con los hijos muchas horas en el día. Es una época de grandes cambios intelectuales y este año se aplica la nueva Ley de Educación y el nuevo programa por lo que es la oportunidad en donde deben formarse nuevos vínculos en el triángulo padres, maestros y alumnos. Vínculos que deben de ser positivos para no perjudicar a los niños en el proceso de aprendizaje. Por eso es bueno, frente a cualquier  dificultad o disconformidad  utilizar la única herramienta que es posible hacer que las personas se entiendan con respeto y educación: el diálogo.
Que tener en cuenta los padres y madres y la familia  antes de empezar las clases:
•    Observar si ven o si escuchan bien o consultar con un especialista. Muchas veces son causas del desinterés y la apatía pasa por este tema.
•    Ver si les gusta el lugar de estudio para que puedan rendir lo mejor posible o tener la oportunidad de cambiarlos de centro escolar si es necesario.
•    Bajar la ansiedad de los primeros días y mantener ciertas aptitudes para observar como viven los chicos los primeros días de clases. Usar minutos al día para conversar con ellos y preguntarles acerca de las experiencias vividas los primeros días.
•    Reorganizar la agenda familiar, no usar tanto los juegos electrónicos para disponer de tiempo para las tareas de clases. Colaborar con todo lo relacionado con el estudio del grado y apoyar las indicaciones que da el profesionmal.
•    Se estimula a lograr una mayor implicación de las familias dentro del ámbito
•    académico. Si bien se puede opinar sobre el programa y el planteo de la educación de que cada padre debe aspirar para u n hijo, nunca olvidarse que los profesionales son los profesores y los maestros. A ellos le debemos el respeto que se merecen. La necesidad de una mayor conciliación laboral y familiar para que padres y madres participen de los asuntos educativos de sus hijos.
•    Recordar día a día la importancia de la educación en la vida de cada ser humano y que hay que encara el estudio con seriedad. Eso lleva a que los alumnos confíen , valoren y aprecien en quienes están a cargo de la enseñanza.
•    Abrir juntos los cuadernos y los libros. Es muy importante porque es una manera de involucrarse juntos en este emprendimiento. Tener un poco de tiempo es imprescindible.

•    Nunca olvidar el respeto y la importancia que debe merecerse la educación  y a quienes están a cargo de trasmitirla. Es muy  difícil el proceso de aprendizaje en estos tiempos. Hay que recordar que esta etapa lleva a formar nuevos ciudadanos con valores que deberán hacer uso de ellos en la etapa adulta.

Ana María Castro Luca
Lic.Cs de la Ed.
E Licenciatura  en C.  de  la  Educación
anamaria28@hotmail.com